Pues mi secreto es la organización. Sí, por suerte o por desgracia soy muy organizada (y mi maridín también) así que intento aprovechar cada momento del día.
Como muchos sabéis, últimamente estoy con proyectos nuevos que necesitan dedicar un tiempo. Éste lo saco de donde puedo. Por ejemplo, los fines de semana, si estamos en casa, aprovecho cuando Rubén duerme para avanzar cositas. Alguna vez, incluso, he cosido con él en brazos je, je, je. Otras veces me pongo un rato en el comedor, mientras él juega con su papi, así estamos los tres y voy viendo las "gracias" que hace el peque. La verdad es que mi marido me lo pone muy fácil :)
Cuando empezamos a vivir juntos, Mike y yo nos repartimos las tareas del hogar. Él se encargaba de limpiar el polvo y pasar el aspirador; yo de los baños y fregar el suelo. La cocina y las lavadoras eran cosa de los dos.
Así que cuando nació Rubén ya teníamos bastante experiencia en cuanto a organización se trataba y seguimos haciendo lo mismo con el peque.
Los primeros 4 meses, como Rubén tomaba pecho exclusivamente, esa era mi tarea principal (aunque hacía mucho más...je je je). Mientras tanto, mi marido ordenaba la habitación, preparaba la cena...lo que tocara en ese momento. Además, seguíamos con las tareas del hogar repartidas.
A veces, incluso, llegamos a hacer turnos para cenar, cuando Rubén era muy chiquitín y nos reclamaba para dormir, por ejemplo.
A medida que nuestro príncipe iba creciendo, volvimos a recuperar hobbies que habíamos dejado un poco de lado y hasta empezamos nuevos proyectos.
Este años, como Rubén ya va a la llar, la organización es aún mayor porque tenemos otro horario más. Así que por las mañanas el avi Manel lleva al peque a la llar (guardería) y al mediodía lo van a buscar los yayos paternos y le dan de comer. Es una suerte poder contar con la familia :) .
Precisamente hablábamos hace unos días con unas compañeras y coincidíamos en que era imprescindible la ayuda externa cuando tienes niñ@s. También estuvimos de acuerdo en que llevarlos a la llar (guardería) es un gran acierto, ya que las actividades que hacen, los juguetes y las infraestructuras están pensadas específicamente para ell@s. Además de lo importante que es que se relacionen con otros niñ@s de su edad y que descubran su entorno.
Antes de ser papis, íbamos juntos al gimnasio dos veces por semana.
Ahora tenemos turnos y todas las tardes organizadas para poder tener tiempo para estar los tres juntos y compartir los descubrimientos del peque.
Dos días a la semana se queda Mike con Rubén por la tarde para que yo vaya al gimnasio. Y otras dos tardes me quedo yo para que vaya él.
Los miércoles le toca piscina a Rubén y siempre vamos los dos para cambiarlo y luego bañarlo. Normalmente, cada semana entra uno con él al agua.
Los viernes aprovechamos para ir a comprar, al parque, a pasear...por el pueblo.
Los fines de semana intentamos hacer las tareas del hogar que entre semana no hemos hecho y poner lavadoras. Cuando necesitamos hacer todo rápido (esta palabra es imposible si está Rubén en casa ji, ji, ji), contamos con la inestimable ayuda de la yaya Ru. Ella se queda un ratito con Rubén y así lo acabamos todo bastante antes.
Creemos que vale la pena organizarse y tener unas rutinas, las cuales son muy beneficiosas para el peque. Por ejemplo: desde que a Rubén se le cayó el cordón (con tan sólo 5 días de vida) lo empezamos a bañar cada día antes de cenar. Y así hemos seguido.
Además de tener un hábito de higiene (muy importante), esto hace que él se sienta seguro porque sabe que después del bañito cenará y se irá a dormir.
Eso sí, si algún día, por lo que sea, no se pueden seguir las rutinas...¡no pasa nada! Es importante organizarse para poder desorganizarse; hacer planes para poder deshacerlos si hace falta.
Os enlazo dos webs que argumentan la importancia de las rutinas y los hábitos. Son muy interesantes.
http://www.guiainfantil.com/articulos/educacion/la-importancia-de-los-habitos-y-las-rutinas-para-los-ninos/
http://atencionycuidadosdelbebe.com/la-importancia-de-los-habitos-y-las-rutinas-para-los-ninos-y-bebes/
Un abrazo.
