viernes, 18 de abril de 2014

EL SUEÑO, ESE GRAN DESCONOCIDO...¿O NO?

Rubén fue muy dormilón desde que nació. En el hospital se pasaba la tarde durmiendo cuando venían a vernos y ni se inmutaba cuando lo cogían e iba de mano en mano.

En casa siguió igual, no había niño. Se dedicaba a comer y dormir. 
Cuando cumplió un mes nos dijo el pediatra que no era necesario despertarlo por la noche para comer, así que algunas noches dormía 6 o 7 horas del tirón entre toma y toma. Esto nos permitía descansar más y reponer fuerzas para el día siguiente.

El peque dormía en el moisés en nuestra habitación y en cuanto oía el mínimo ruido empezaba a moverse e incluso, alguna vez, se llegó a despertar. Además, los "pedetes" que se tiraba y los ruiditos que hacía durmiendo nos despertaban a nosotros y nos desvelaban...
Rubén se movía mucho y se recorría la mini cuna de lado a lado hasta que chocaba con la tela lateral y se despertaba. 
Así que, por el bien de los tres, decidimos, cuando hizo los dos meses, llevarlo a dormir a su habitación. El cambio se lo hicimos escalonado: primero en su habitación con el moisés, luego ya lo pasamos a la maxi cuna.
Siguió moviéndose mucho, pero tenía más espacio para recorrer y dormía estupendamente (y nosotros también).


Cuando cumplió los 4 meses hizo un cambio: empezó a despertarse por la noche varias veces, algunas muy seguidas. Le daba pecho para que se durmiera pero tenía muchos gases y no se acababa de relajar. El pediatra nos comentó que ya podíamos darle agua por la noche, que no hacía falta darle de comer cada vez que se despertaba. Y así lo hicimos. 
Siguió un tiempo muy inquieto, pero cada vez se despertaba menos. 
A los 6 meses dejé de darle la toma de las 5 de la mañana y la sustituimos por agua para que se comiera mejor la papilla del desayuno a las 8. 

Durante el día fue reduciendo las horas de sueño y ahora duerme de una hora y media por la mañana y media hora por la tarde.

Por las noches le damos el bibe sobre las 8.30h, después de bañarlo, y se duerme hasta las 8 de la mañana del tirón. Alguna noche se despierta porque tiene sed; le damos agua y sigue durmiendo.
La verdad es que es un gustazo que ahora duerma bien, pues los dos meses que estuvo con gases por la noche fueron demoledores. Mike y yo parecíamos zombies durante el día en el trabajo.

Para los papis que tengáis problemas para que los peques concilien el sueño, existen papillas y champús que ayudan a relajarlos, seguro que vuestr@ pediatra o farmacéutic@ os puede ayudar. 

Besitos.